AUTOESTIMA Y MUJER (PARTE II)

Algunas claves para cultivar el amor propio y el autocuidado

En este articulo voy a nombrar algunas claves y estrategias para que cada una de nosotras comencemos a ponernos en el centro de nuestras vidas. Sin embargo, considero que desde la psicología y todas sus corrientes y especialidades, es fundamental aportar una mirada social, que nos permita a las y los profesionales ser agentes de cambio hacia la transformación de las estructuras de poder,pues sin esto difícilmente podremos lograr una salud mental plena. Quiero matizar que no todo depende del sujeto, que hay unas condiciones de vida materiales y de clase, que limitan y condicionan el desarrollo, como ocurre con las niñas y mujeres (esto se cambia con la educación, las políticas sociales para la igualdad y el bienestar de las personas y la justicia)

Algunas claves para situarme en el centro de mi vida pueden ser las siguientes:

– Cuestionar los mensajes que nos transmitieron y las experiencias que vivimos, es decir,los roles y estereotipos sexistas, las recetas que nos dieron para ser niñas, recetas que nos han limitado en el desarrollo de nuestras potencialidades y capacidades.
– Aprender a poner limites y desprendernos de la culpa. Decir que NO, decir que SI, en función de lo que necesitamos, es salud. Las mujeres tenemos serias dificultades para poner limites, pues fuimos educadas en la disponibilidad absoluta hacia el otro y en el dar como base de la feminidad tradicional. La generosidad, la incondicionalidad y la abnegación, pasan una importante factura, pues cuando ya no podemos mas es probable que reventemos o que nos llenemos de resentimiento. La clave aquí es poner limites lo antes posible, con determinación y asertividad, desde este lugar no es necesario entrar en la recriminación y la bronca, simplemente basta con explicar porque no queremos algo o porque si y las personas que nos rodean, nos quieren y respetan han de comprender.

– Dedicar tiempo a conocerme. El autoconocimiento me llevara a generar autoapoyo y esto me servirá para romper la dependencia con el exterior y los otros, comenzando a ser dueña de mi propia vida. Puedo practicarlo de varias formas: aprender a estar sola, quedarme conmigo misma sin acudir de inmediato al contacto con el otro, aprender a meditar,hacer aquello que me gusta, dejar de posponerme y atenderme en mi salud, si necesito ir al medico para verme eso que hace siglos que no me reviso, a ginecología, a terapia etc. Es muy importante compartir lo que me pasa con otras mujeres, a veces creo que soy culpable de lo que me pasa o que esto sólo me ocurre a mi porque soy débil, y cuando lo comparto me doy cuenta que lo que me ocurre a mi puede ocurrirle a muchas, buscar y crear espacios de confianza con otras mujeres me permiten conocerme mejor. (Estos contactos los puedo establecer a través del tejido asociativo de mi ciudad, en algunos programas dirigidos a mujeres de las instituciones publicas e incluso desde los centros de salud, que algunas veces ofertan espacios propios para las mujeres)
– Aceptarme tal cual soy, sin abalorios, sin edulcorantes. El patriarcado y el capitalismo nos quiere ocupadas en ser bellas y deliciosas a los ojos de los demás, ahí invertimos mucho tiempo y dinero, a veces incluso haciendo cosas que no nos gustan o nos perjudican a nuestra salud, como operaciones, tratamientos de belleza muy invasivos y un largo etc. Escapar de estos mandatos y obligaciones de belleza, es muy complicado pues parece que si no cumples con el tipo de mujer que quieren algunos hombres, seras una fracasada, sin embargo cuando practicamos quitarnos estas ataduras, tenemos mas tiempo para nosotras, dejamos atrás aparatos y vestimentas incómodas y estamos mas disponibles para vivir nuestra propia vida, nuestros proyectos, a nuestro gusto, guste a quién guste…

– Cuidar, sin descuidarme. Aquí también entra en juego pedir ayuda, apoyo y acompañamiento,esto de llevarlo todo para delante, es imposible, a no ser que comprometas tu salud. El patriarcado nos quiere inseguras, sin tiempo para recuperarnos, atadas a miles de tareas,muchas incluso nos las venden como empoderantes, como el hecho de combinar sin descanso la jornada de trabajo remunerado, con la jornada de trabajo explotado en casa. Es decir, la superwoman, como si fuéramos robots o máquinas. Este cuento ha tenido mucho éxito, sobre todo porque evita la corresponsabilidad e implicación de los hombres, aquellos que deben ser nuestros compañeros.

– Cuidar como nos sentimos con nosotras mismas, pues esto es lo que nos acompañará en nuestro día a día. Muchas veces libramos una guerra interna que nos desgasta hasta limites insospechados, esta guerra es fruto de todas las exigencias y mensajes distorsionados que recibimos desde que somos niñas. Aquí un buen ejercicio podría ser desvelar donde me hago daño y como, que cosas me digo a mi misma, como de cruel soy y que cosas me gustaría contarme. Una vez que identifico a la jueza que llevo dentro, esta muy bien darse el permiso de descansar y aprender a contarnos a nosotras mismas una película mas amable sobre quienes somos. Un ejercicio bonito puede ser situarse delante de un espejo, no para pintarse o mirarse las canas o lo granitos, si no para hablarme bonito; decirme que soy lista, fuerte, atrevida, que hice un proyecto super bueno, decirme a mi misma lo que me vendría bien, lo que no quiero en mi vida etc.

– Acercarme sin miedo y sin rechazo a mi cuerpo. A través del erotismo puede ser un buen comienzo, estimular mi cuerpo, la capacidad de placer y gozo, algo que cultural e históricamente ha estado negado para las mujeres. Siempre nos vemos con los ojos de las personas de fuera, y en un mundo patriarcal aprendemos que somos válidas si somos apetecibles y sexys para los hombres. Por eso tenemos que aprender a darles placer a ellos antes que a nosotras mismas, olvidándonos de la gran capacidad para sentir placer que tenemos las mujeres de forma natural, gracias a la anatomía de nuestro cuerpo y al clítoris, una parte aún muy inexplorada y una fuente de autoestima y placer bien importante. Cuidarnos en la intimidad del placer sexual a nosotras mismas, nos protege cuando intercambiamos experiencias con otras personas.

– Encontrarme con mi propio poder: empoderamiento personal y colectivo. Para ello es fundamental el encuentro con las otras. Los vínculos y la convivencia entre mujeres tienen un doble beneficio: por un lado nos permiten sanar y por otro organizarnos para transformar el mundo en que vivimos, no basta con trabajar lo individual, para que nuestra autonomía se desarrolle en toda su plenitud, es fundamental que todas las mujeres puedan alcanzarla. Una buena forma es implicarme en colectivos de mujeres, como asociaciones, encuentros etc.
– Acercarme al feminismo, a su teoría, a su practica, a como les fue a otras mujeres en la historia. Esto me va a permitir recuperar referentes que puedan servirme de guía en mi camino hacia la salud y la libertad…

Todo esto requiere de practica, de entrenamiento, de apertura para explorarnos a nosotras y nuestro entorno, no es algo que se consiga de la noche a la mañana, es un proceso de aprendizaje, sobre todo de aprender a quererme. A veces la gente que me rodea puede que se extrañe, que no lo comprenda, que necesiten su tiempo para aceptar nuestro cambio, esto no debe detenernos. Otras veces es muy importante pedir ayuda profesional, si sospechamos vivir una relación de violencia y/o abuso, ya que aquí el riesgo es mayor. Pide ayuda a alguien cercana a ti y acude a los servicios especiales de atención a la mujer de tu municipio, aquí dejo el enlace a los centros especializados en el municipio se Sevilla (Centros Integrales de Atención a la Mujer del Ayuntamiento de Sevilla 2.020 — Mujer – Igualdad)

Seguiremos profundizando en estos asuntos, que nos interfieren en nuestro desarrollo y sobre todo en como podemos ir revirtiendo el daño y acercarnos mas al amor propio.

Espero pueda servirte de ayuda esta reflexión que comparto contigo, recordarte que no estas sola, la Mirada Violeta tiene sus puertas abiertas y también el corazón

ENLACES BIBLIOGRÁFICOS DE INTERES

Marcela Lagarde – Claves feministas para la autoestima de las mujeres.pdf | Mujer | Feminismo (scribd.com)
La Soledad y la Desolación, por Marcela Lagarde | Llegó la era: escuchando a las mujeres (Frases) (mujerpalabra.net)
Página/12 :: las12 (pagina12.com.ar)

4 comentarios. Dejar nuevo

  • Mi experiencia personal, es igual a la que habéis planteado, mirarte al espejo para verte bonita, no tenemos que pintarnos los labios, para saber que lo somos, no necesitamos que nos manipulen con las modas, somos guapa con cualquier trapo que nos pongamos.

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  • Magnífica esta segunda parte!!!
    Es muy valiosa la guía que nos regalas para crecer individualmente como seres humanos. Sin tener que demostrar a nadie que cumplo con el prototipo que han confeccionado para mi como mujer. Me gusta ser como soy sin estar pendiente de que les gusta a los otros. Gracias!

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    • Muchas gracias Celia! Que importante eso que dices de gustarte a ti misma sin estar pendiente de agradar a otros. Me alegra mucho que esta pequeña guía pueda ser de ayuda y valga para otras mujeres

      Responder

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